El conductor y comediante Jimmy Fallon y los chicos de Maroon 5 tomaron una de las estaciones más concurridas del metro de Nueva York para dar el concierto más inesperado.
Disfrazados de músicos callejeros aparecieron en el Rockefeller Center y comenzaron a tocar el clásico rockero “Crazy little thing called love”. Su gran interpretación hizo que decenas de transeúntes comenzaran a colocarse a su alrededor pero sin darse cuenta de la verdadera identidad de los chicos.
Justo antes de tocar la segunda canción, Adam Levine (vocalista de la banda) y compañía desataron la locura interpretando uno de sus éxitos más reciente “Sugar”.
